Cuando asistimos a cualquier proceso de construcción, bien sea de un edificio o de una infraestructura, uno de los primeros trabajos que se van a llevar a cabo son los movimientos de tierras. Esta fase inicial consiste en una serie de actuaciones que tienen como objetivo acondicionar el terreno antes de proceder a la cimentación.
Previamente, es necesario realizar algunos estudios para poder ejecutar la obra correctamente, por ejemplo estudios topográficos, socio-económicos o sobre las condiciones climáticas. La realización correcta de estos trabajos condicionará, en gran medida, la cimentación sobre la que se tienen que levantar los edificios u obras de infraestructura. Como puedes ver, esta etapa es de vital importancia dentro del proceso constructivo.
Fases en las que se desarrolla este movimiento de tierras
Como se ha señalado, los movimientos de tierra comprenden una serie de trabajos que se llevan a cabo de manera sucesiva. Podemos diferenciar varias etapas que se detallan a continuación:
Fase de preparación
Esta etapa consiste en organizar cómo van a llevarse a cabo los trabajos del movimiento de tierra. Ahora se determinará la maquinaria a utilizar. También se realizan en esta parte una serie de estudios de replanteo con el fin de conocer a la perfección la geomorfología y las características geotécnicas del terreno.
Desbroce y despeje
Antes de empezar a poner en marcha las excavadoras, hay que limpiar el terreno de maleza, hierbas, arbustos, árboles y otras plantas que puedan obstaculizar las excavaciones posteriores. Es necesario eliminar los árboles y arbustos arrancándolos de raíz. Para ello es imprescindible excavar hasta una profundidad de 50 centímetros por debajo del rasante, como mínimo.
Fase de excavación
Se pueden diferenciar tres tipos de excavaciones: el desmonte, el vaciado y el terraplenado. La primera variante tiene como objetivo principal eliminar pequeños montículos. Durante el vaciado, el plano de arranque va a estar ubicado debajo del terreno. Finalmente, el terrraplenado nivelará el suelo preparándolo perfectamente para pasar a la cimentación.
Hay una serie de factores que van a determinar las máquinas a utilizar. Fundamentalmente, son las peculiaridades de los materiales que forman el terreno y la complejidad a la hora de excavar los aspectos que nos harán usar un tipo de maquinaría u otro. Hemos de tener en cuenta que se van a producir deformaciones en el material extraído, sobre todo, respecto a su humedad y su encaje, lo que provoca una disminución en la densidad y un aumento de volumen. Es importante tener en cuenta estas alteraciones del material de cara a la fase del terraplenado.
Debido a lo delicado de este tipo de obras, lo ideal es encargar estos trabajos a una empresa experimentada y especializada en grandes movimientos de tierra. Aldaso es una organización empresarial con más de diez años de experiencia en obras de ingeniería civil.
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